Un jardín multinacional

Pamplona es ya “la segunda capital norteamericana despues de Hawai”, es un decir, en poseer un “Galaxy Garden”. La iniciativa la ha tomado el Ayuntamiento de Pamplona. El concejal de Urbanismo Jose Abaurrea, el recién incorporado director de Parques y Jardines y el divulgador científico y empresario norteamericano Jon Lomberg firmaron un acuerdo en Noviembre de 2016 y estan ya listos para el aterrizaje de un jardín galáctico procedente de Hawai programado por la industria norteamericana “Galaxy Gardens Enterprise Tm”.

Se ha producido un revuelo, diríamos confusión galáctica que recuerda un poco al “Bienvenido, Mister Marshall” de los años cincuenta. Para iniciativas USA, el “Plan Marshall”. Para aterrizajes, el de la luna. Para tripulaciones, Amstrong, Aldrin y Collins. Un pequeño paso para el hombre.

En concreto, el próximo mes de junio, se espera la inauguración de unos 900 metros cuadrados en pleno Parque de Yamaguchi, del llamado y patentado “Jardín de la Galaxia”. El primer “hijo-Jardín” de “Galaxy Gardens Enterprise LLC”, empresa norteamericana en la que participa el Sr. Lomberg, diseñador del jardín original en Hawai hace años.

¿Dónde iba a estar el jardín de la galaxia mejor que aquí? El Ayuntamiento de Pamplona se ha convertido en el primer convencido receptor mundial de dicho proyecto. El Parque de Yamaguchi, vientre de alquiler que necesita para crecer. El servicio de áreas verdes de Pamplona en el equipo de vigilancia intensiva para que tenga un parto feliz, y el equipo de mantenimiento de jardines de este Ayuntamiento para que esté en todo momento en estado óptimo, requisito imprescindible para conservar el permiso de patente. El jardín que alcanzará su desarrollo arbóreo definitivo no antes de un par de años, no va a poder ser un clon del original enclavado en Hawai, aunque presenta a priori un buen mestizaje, un cerebro USA y el cuerpo español. El sr. Lomberg poseedor de la patente y responsable artístico del mismo se encargará de que todo se cumpla.

Claro que el Plan que nos trae, con toda esa ingeniería, no va a ser gratis, todo tiene un precio. Sólo por traer al mundo Pamplonés ese pequeño jardín ha sido necesario abonar la cantidad de 22.000 dólares USA en concepto de licencia y royalty por derechos de explotación por dos años, plazo que finaliza el 31 de Mayo de 2018, fecha en la cual se debaría renovar su licencia por valor de 1.800 dólares y así cada dos años, ¡vaya plan!

Pero no se crean que es caro. Nadie da dólares a cuatro euros, estamos hablando de nuestra Galaxia, la Vía Láctea, incluido su agujero negro en el centro, aunque yo lo quitaría por si acaso. Tambien se prevée, según consta en el contrato firmado con el Sr. Lomberg, la explotación comercial con la edición de ciertos objetos souvenirs como por ejemplo, postales, bolígrafos, tazas, camisetas, etc. En plan “marchendise” vamos. Todo esto puede ser muy rentable, y hasta podemos llegar a hacernos famosos, con permiso de San Fermín. Ya saben cómo les van estas cosas a los americanos.

Así pues pronto podremos ver al Sr. Lomberg, padre del jardín con “pan royalty debajo del brazo”. Presumiblemente viajará a Pamplona desde Hawai para certificar in situ que el jardín cumple con todos los requisitos necesarios para transformarse en un “hijo del jardín original en Hawai” y darnos la licencia y permiso de explotación del mismo, tal y como se especifica en el contrato, con los gastos de sus viajes, por supuesto, siempre reembolsables. Bienvenido , Mr. Lomberg, por fin vamos a poder entender y comprender nuestra Galaxia con una simple zambullida en un jardín de tan sólo el tamaño aproximado de una piscina, olimpica eso sí. Yo le auguro un gran éxito, mientras sigamos pagando claro, porque si no el jardín y su proyecto se nos desgüaza.

No me cabe duda que al Sr. Lomberg le van las familias numerosas pues ha manifestado ya que le gustaría tener muchos mas “hijos-jardín” por todo el mundo. Hoy en día existen muchos métodos, ingenierías e ingenios que lo pueden permitir. Aunque no sé yo si hallará tanta tecnología como ha encontrado en Pamplona. Aunque no tenemos participaciones en su empresa, por ahora, y no nos toque ni un dólar en beneficios siempre nos quedará el orgullo de haber sido los primerizos del jardín Hawaiano, y si no vienen más al mundo, pues nada, el orgullo de ser los únicos.

Fuentes bien informadas dicen que se piensa en la posible construcción de un ascensor exterior junto al Planetario para poder apreciar mejor desde la altura el dibujo del jardín. Esperemos que antes que dicho ascensor se construya el tan necesitado y demorado ascensor de Mendillorri.

Las valoraciones artísticas son siempre subjetivas. Las valoraciones culturales, cuestionables. Las científicas…, lo que verdaderamente nos dicen los científicos del Universo es que el Espacio es un gran desconocido, incluida nuestra Galaxia. De lo demás, cada cual que piense y saque sus conclusiones.

Frente al Jardín multinacional y compravendido, frente a una Galaxia hecha de arbustos y plantas, frente al reduccionismo friki como estilo, yo me inclino por el jardín original, propio, sencillo y natural, bucólico y evocador. El jardín que siempre a inspirado a artistas, a enamorados, a paseantes por pamplona por el Parque de Yamaguchi original, por poner un ejemplo.